La Alegria.
“Estad siempre alegres”. 1Ts 5:16 La alegría es una característica de los santos. Por ejemplo, Santo Tomás More, el mártir inglés: era un santo de buen humor aun cuando enfrentó la muerte. El rey Enrique Octavo lo condenó a morir por el hacha. Antes de poner su cuello en el bloque de madera, le dio una moneda a verdugo. “Es para tu servicio,” le dijo. Pero movió a un lado la barba que creció mientras estaba en la cárcel. “Favor de no cortar la barba. Ella no ha cometido ningún crimen.” A continuación les comparto algunos proverbios distintos para reflexionar sobre el don de la alegría en nuestro diario vivir y que es posible cultivarla. “El hombre que no sabe sonreir, no debe abrir tienda”. (Proverbio árabe) “Por lo cual rebosáis de alegría, aunque sea preciso que todavía por algún tiempo seáis afligidos con diversas Pruebas…” (1Pe 1:6) “Aprende a sonreir a la vida que ella sonreirá a ti”. (Anónimo) “Quien no perdona no es feliz” (Adam J. Jackson) “Cada uno de nosotro